La vida amorosa de Lorna es un desastre: sale con un hombre casado, sufre por ser «la otra» y acaba de enterarse de que él se ha conseguido una segunda amante… Las amigas de Lorna la quieren, pero están hasta las narices de sus lamentos y la emplazan a que vea a un psicólogo. Así empieza un año de peripecias y situaciones desopilantes –en la consulta y fuera de ella–, narradas con frescura y complicidad.