Se trata de un busto del insigne escritor realizado en terracota, obra del artista local Antonio Gálvez, y posado sobre un pedestal de granito
La colocación del monumento en esta zona de la localidad es una iniciativa del Ayuntamiento de La Rambla para recordar la presencia de Miguel de Cervantes Saavedra en nuestro municipio en el año 1587, y destacar este hecho histórico desde el punto de vista cultural y turístico, así como la vinculación del autor del Quijote con La Rambla, lo que acentúa la denominación de ciudad cervantina actualmente (antes de este título, villa Cervantina).
La ubicación de la obra en esta plaza responde a la devoción de Cervantes con la orden Trinitaria, y en cuyo convento rambleño, uno de los más importantes de dicha orden por aquella época, ejerció Fray Juan Gil, que gestionó en 1580 el rescate de Saavedra, preso por aquel entonces en Argel.
La pieza está compuesta por una figura de la imagen del ilustre escritor realizada en barro cocido por el escultor rambleño, Antonio Gálvez Jiménez. En la base de granito, se incluyen en una de sus caras, dos placas en cerámica, una con una reseña histórica de la estancia de Miguel de Cervantes en nuestro pueblo, y en la otra, una copia de su firma original del poder notarial otorgada en nuestra ciudad el 28 de diciembre de 1587. En la parte trasera del monolito, se ha incrustado la misma rubrica, pero confeccionada en forja.